La tendinopatía es una condición común que afecta los tendones, estructuras que conectan los músculos con los huesos y que son fundamentales para el movimiento y la estabilidad.
Las tendinopatías pueden ocurrir en diversas partes del cuerpo, como el tendón de Aquiles, el tendón rotuliano, o los tendones del manguito rotador, y suelen ser el resultado de sobrecarga, movimientos repetitivos o lesiones agudas.
Este tipo de lesión puede ser dolorosa y debilitante, afectando tanto a atletas como a personas que realizan actividades cotidianas.
En este blog, explicaremos las diferentes fases de recuperación de una tendinopatía y cómo la fisioterapia juega un papel clave en cada etapa.
¿Qué es una tendinopatía?
Este término se utiliza para describir una lesión en el tendón que puede incluir inflamación (tendinitis), degeneración (tendinosis) o una combinación de ambas.
La tendinopatía se caracteriza por dolor, rigidez y disminución de la función en la zona afectada. Generalmente, se desarrolla como resultado de un uso excesivo o incorrecto del tendón, aunque también puede ser causada por un traumatismo directo o por cambios en la biomecánica del cuerpo.
Fases de recuperación de una tendinopatía
La recuperación de una tendinopatía puede dividirse en cuatro fases principales:
1. Fase de Alivio del Dolor y Reducción de la Inflamación
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- Objetivo:
El objetivo principal en esta fase es aliviar el dolor y reducir cualquier inflamación presente en el tendón.
El tratamiento inicial de una tendinopatía suele enfocarse en la reducción de síntomas agudos. Esto incluye el manejo del dolor y la inflamación, que son comunes en las etapas iniciales de la lesión. Durante esta fase, es fundamental evitar cualquier actividad que pueda empeorar el estado del tendón.
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- Estrategias de tratamiento:
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- Reposo relativo: Aunque el reposo absoluto rara vez es recomendable, es importante reducir o modificar las actividades que causan dolor. En lugar de detener completamente la actividad física, podemos sugerir alternativas de bajo impacto que no sobrecarguen el tendón afectado.
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- Terapia de frío: La aplicación de hielo en la zona afectada puede ayudar a reducir la inflamación y aliviar el dolor. Esto es particularmente útil durante las primeras 48 a 72 horas después del inicio de la lesión.
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- Electroterapia: Técnicas como la estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (TENS) o la terapia con ultrasonido pueden ser utilizadas para aliviar el dolor y reducir la inflamación.
2. Fase de Restauración de la Movilidad
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- Objetivo:
Recuperar la movilidad y la flexibilidad del tendón y la articulación sin causar dolor ni agravar la lesión.
Una vez que el dolor y la inflamación han disminuido, el siguiente paso en el proceso de recuperación es restaurar la movilidad en la zona afectada. Durante esta fase, nuestros fisioterapeutas se centrarán en mejorar el rango de movimiento de la articulación asociada al tendón afectado.
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- Estrategias de tratamiento:
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- Ejercicios de movilidad articular: Ejercicios suaves de estiramiento y movilidad ayudan a restaurar el rango de movimiento sin sobrecargar el tendón. Es importante que estos ejercicios se realicen de manera controlada y progresiva.
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- Masaje terapéutico: Técnicas de masaje, como el masaje de fricción transversa, pueden ayudar a romper el tejido cicatricial en el tendón, mejorar la circulación sanguínea y promover la curación.
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- Movilización articular: Nuestros fisioterapeutas pueden utilizar técnicas de movilización para mejorar la movilidad de la articulación y aliviar la tensión en el tendón.
3. Fase de Fortalecimiento
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- Objetivo: Reforzar el tendón y los músculos circundantes para mejorar la capacidad del tendón de soportar la carga y prevenir futuras lesiones.
Una vez que se ha recuperado la movilidad, el siguiente paso es fortalecer el tendón y los músculos que lo rodean. Esta fase es esencial para garantizar que el tendón pueda soportar las demandas físicas que se le impondrán durante la actividad diaria o el deporte.
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- Estrategias de tratamiento:
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- Ejercicios de fortalecimiento excéntrico: Los ejercicios excéntricos (donde el músculo se alarga mientras está en tensión) han demostrado ser particularmente efectivos para el tratamiento de tendinopatías. Estos ejercicios ayudan a mejorar la fuerza y la capacidad del tendón para manejar cargas sin lesionarse nuevamente.
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- Ejercicios de estabilidad y equilibrio: Además del fortalecimiento del tendón, es importante mejorar la estabilidad de la articulación y el control neuromuscular. Ejercicios que desafíen el equilibrio y la coordinación pueden ayudar a mejorar la función general de la articulación.
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- Entrenamiento de fuerza progresivo: A medida que el tendón se fortalece, el fisioterapeuta irá incrementando la intensidad de los ejercicios, incorporando pesas, bandas de resistencia y ejercicios funcionales que simulen las actividades que el paciente realizará en su vida diaria o durante el deporte.
4. Fase de Retorno a la Actividad
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- Objetivo:
Reintegrar al paciente en sus actividades normales o deportivas de manera segura y sin dolor.
La última fase de la recuperación de una tendinopatía implica la vuelta a la actividad normal, ya sea la práctica de deportes o las actividades cotidianas. El objetivo en esta fase es asegurarse de que el tendón esté completamente rehabilitado y preparado para manejar las demandas físicas.
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- Estrategias de tratamiento:
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- Reintroducción gradual a la actividad: Guiaremos al paciente en una reintroducción progresiva de sus actividades, comenzando con movimientos y ejercicios de bajo impacto antes de avanzar a actividades más intensas.
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- Prevención de recaídas: Se trabajará en técnicas para prevenir futuras lesiones, como el entrenamiento de la técnica correcta, el calentamiento adecuado y la incorporación de ejercicios de fortalecimiento y flexibilidad en la rutina regular.
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- Educación del paciente: Además de los ejercicios, el fisioterapeuta educará al paciente sobre la importancia de la recuperación activa, la autoevaluación del dolor y los síntomas, y la implementación de estrategias de autocuidado para mantener la salud del tendón a largo plazo.
La recuperación de una tendinopatía es un proceso que requiere tiempo, dedicación y un enfoque estructurado basado en la fisioterapia. En Fisioterapia Hispanidad trabajamos con las fases de alivio del dolor, restauración de la movilidad, fortalecimiento y retorno a la actividad, para conseguir aliviar los síntomas, mejorar la función del tendón y prevenir futuras lesiones.
Si están buscando tratar tu tendinopatía en Fuengirola o Mijas, contacta con nuestro clínica FISIOTERAPIA HISPANIDAD y te ofreceremos un plan de tratamiento personalizado.
